Corría el año 2014 en una Europa desolada, secuestrada por malos gobernantes y presa de un capitalismo salvaje que campaba a sus anchas por casi todo el territorio. El viejo continente que fuera referencia de conquistas sociales y fiel garante de libertades y derechos estaba irreconocible. Conflictos y emociones que quedaron sin resolver aquellos lejanos años de guerra, asomaban de nuevo como luces intermitentes que anunciaban un giro…