Nos despertamos con otro asesinato machista, hoy en Móstoles. Aún no sé que van a recoger los titulares pero éste, el de la foto, es de hace unos días. Y al leerlo, a una no le queda otra que empezar el día enervándose. Es indignante toparse con la “pasividad” del verbo “morir” para referirse al asesinato de otra mujer, ya sólo falta que el verbo se utilice también…